Las novelas eróticas.
Seguramente lo recordáis, había un premio literario denominado “La sonrisa vertical”, a través de un concurso literario convocado y publicado por Tusquets Editores. El jurado estaba presidido desde su creación por el director de cine Luis García Berlanga. Aquello duró desde el año 1979 hasta el 2004. A la cabeza se me viene, uno de los libros premiados que creo que es uno de los más conocidos, “Las edades de Lulú” de Almudena Grandes.
Este género, muy incluido a la vez en la llamada también “novela romántica”, siempre ha estado a nuestro alrededor, aunque como todo en la vida ha tenido su momento de auge o etapas que han estado en la “pole” de la lectura.
Fanny Hill, de John Cleand, considerada como la primera gran novela erótica publicada como tal, donde una inocente chica de pueblo llega a Londres y se ve abocada a trabajar en un burdel. Estamos hablando de una novela de 1746, en pleno siglo XVIII.
El amante de Lady Chaterley, de D.H. Lawrence (1928), narra la historia de una mujer casada de alta cuna con un hombre de baja condición social en la moralista Inglaterra de los años veinte del pasado siglo.
El amante, de Marguerite Duras, escrito ya en 1984, es una narración autobiográfica, que expresa el deseo femenino y la muerte. Una historia con mucha fuerza, que no deja a nadie indiferente.
Más actuales, con un mercado de venta bastante grande nos encontramos a Megan Maxwell, que tiene ya un sinfín de títulos, por dejar alguno, por ejemplo “Pídeme lo que quieres”. Hace años destaco también un libro, que después se convirtió en una saga, me refiero a “Las cincuentas sombras de Grey” de E.L.James.
Un día tomaba café con un escritor novel, con v, que escribe romántica y me comentaba que toda novela tiene que tener algo de erotismo, ya que la vida no deja de tener su punto erótico. Cierto es, aunque hay novelas o libros que cuando pierden esa seducción, ese toque elegante, lleva a confundirse con algo similar al porno.
Te toca a ti, que no sé qué más contar. Sé que hay un sinfín de novelas de este género, pero he mencionado las que he leído y me he ido levantando de la silla a buscar en mi estantería. Vamos a ello:
¿Te gusta este tipo de género?
¿Nos recomienda algún título que te haya encantado?
Después de este trocito de lectura, nos vamos hasta la próxima semana que vamos a hablar de un escritor, algo desconocido pero que tiene una frescura bestial: Daniel Glattauer. Ya os contaré.
Mil gracias por tu acompañamiento. Hasta la próxima.
Diego Santos Márquez.
11 Comments
Si me gusta este género, la novela erotica y recuerdo el premio de ” la sonrisa vertical” gracias al cual descubi a una de mis autoras favoritas, Almudena Grandes,; he leído casi toda su obra y espero con ilusión su próxima novela. He leído también El amante de Lady Chaterley, El amante y por supuesto Cincuenta sombras de Grey. La saga Outlander, de Díana Gabaldon, además de poder encuadrarse el la novela histórica también se puede considerar, erótica, en particular las tres primeras novelas.Un saludo.
Gracias Mercedes. También descubrí a Almudena en estos Premios. ¡Un abrazo!
Me gusta el género romántico con algo de erotismo,donde se mezclan la pasión,los sentimientos,pero sin vulgaridad.un ejemplo de ello,” Sorpresa te da la vida”,una novela muy bien escrita donde se mezclan la intriga y la trama familiar a demás de todo lo demás.feliz Domingo!
Gracias Helena. ¡Un abrazo!
Pues justo ahora mismo estoy incursionando en esa linea de novelas.. . la que actualmente escribo.. . todo un reto.. . Feliz domingo y gracias por el post.. .
Gracias Juan. ¡Un abrazo!
.. . Pues justo ahora mismo estoy incursionando en esa linea de novelas.. . la que actualmente escribo.. . todo un reto.. . Feliz domingo y gracias por el post.. .
Me gustan las novelas románticas o de misterio o cualquier otro genero con alguna escena erótica, pero el pídeme lo que quieras o las 50 sombras, me resultaron imposibles de terminar, llega un momento en que me parece que no avanza la trama. Saludos.
Gracias Pilar. Coincido con tu comentario. ¡Un abrazo!
Este tipo de novelas me resultan empalagosas, la verdad, no puedo con este género literario.
Gracias José. ¡Un abrazo!
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