Ese tipo de lector tan especial.
El otro día tuve ocasión de asistir a una charla sobre libros. Se hablaba del estado de ánimo para elegir las lecturas. Es decir, que las emociones y sentimientos que en ese momento se tenga determinarían el libro adecuado para leer en ese instante.
Reconozco, que al principio, empezó a aburrirme aquello, además cuando uno de los ponentes calificó a esos lectores como “mood reader”, pensé de manera inconsciente “otra chorrada más”. Sin embargo, ya allí, solo me quedaba oír, aunque tengo que reconocer que al final no me pareció tanta “chorrada” como antes he manifestado y todo tiene su particular visión, aunque en estos tiempos todo lo denominamos con estas palabras bilingües o vete a saber que son.
Piensas, estoy convencido que ha solido ocurrirnos alguna vez, que llegas cansada de tu jornada laboral, y una vez puedes sentarte en el sofá coges un libro para entretenerte antes de hacer la cena. Una nueva lectura que, al cabo de varios capítulos no sientes conexión alguna con lo que nos cuenta. Te sorprendes a ti misma, ya que es uno de tus autores favoritos, el género y la trama es de las que siempre te han gustado, pero no funciona. Da la sensación de estar leyendo de una manera forzada, cuando piensas que quizás debería leer otro libro o quizás estar dedicando tu tiempo a otra tarea. Si alguna vez te ha ocurrido algo así, puedes tener algo de lector “mood reader”
Este tipo de personas busca satisfacer sus necesidades anímicas a través de los libros, y eso es algo bueno. Pero tan bien este grupo de gente puede generar cierta angustia a la hora de leer, mientras da con el libro correcto, y con ello disminuir poco a poco el hábito lector.
Pero sin irnos muchos por los “cerros de Úbeda” todos tenemos algo de ese tipo de lector, sino tú mismo compruebas o analizas estos puntos:
1.-¿Sueles dejar muchos libros a medias? No es un hecho fuera de lo común, más de una vez nos ha podido ocurrir. Pero si está práctica es “habitual” y te cuesta encontrar algo para leer a tu gusto. Háztelo mirar, tienes pinta de lector “mood reader”.
2.-Listas de libros pendientes. Si se hace eterna, eres más comprador de libros que lector, y vas acumulando ejemplares a la espera de esos momentos para disfrutar de ellos.
3.-Te cuesta recomendar libros y autores. Estos lectores conocen muchos títulos, y a la vez tiene muchos títulos sin acabar, por lo que no le es fácil recomendar a un conocido o amigo una lectura que haya podido disfrutar.
Al final de la charla, vi a la gente entusiasmada y comentando lo que le solía suceder en los momentos lectores. Resulto aquello algo parecido a una charla psicológica. Y tengo que reconocer, que sin ser nada del otro mundo me hizo pasar el rato, analizar y aprender, que nunca está de más.
Y tú ¿te consideras un “lector mood reader?
¿Qué piensas al respecto?
Gracias por acompañar por estos “lares”. Sabes de sobra, que tú presencia hace más estable este sitio. Otra vez, gracias mil.
Diego Santos Márquez
12 Comments
Leer cada día es la fórmula. Luego, cada cual la aplica a su manera. Según sus necesidades, sus gustos y su estado de ánimo. Hay momentos de poesía y hay horas de una buena historia. Hay horas de tristeza que no acompañan a la lectura. Ni hay libros que nos liberen de ella. Será el otoño.
Gracias Paco. ¡Un abrazo!
En mi caso me obligó a terminar de leerlo, pero existen muchos factores que interfieren en seguir o abandonar, pero cuando alguna vez me ocurre no dejo de sentirme culpable, feliz domingo, excelente contenido! Saludos
Gracias Helena. ¡Un abrazo!
No suelo dejar un libro sin terminar, me da mucha rabia, pero alguna vez lo hago.Cuando era más joven me obligaba a terminar todo lo que empezaba pero ahora pienso que hay muchos libros esperando a ser leídos y no quiero » perder» el tiempo. Saludos.
Gracias Mercedes. ¡un abrazo!
Buen análisis de los Mood reader, aunque es cierto que a veces te apetece leer algunas cosas dependiendo del ánimo en que te encuentres, no me considero un Mood reader, jijijijijijiji
Gracias José. Un abrazote.
Normalmente cuando compro un libro y si al principio me cuesta concentrarme o no me divierte,intento seguir leyendo porque creo que de algún momento a otro va a venir algún devenir espectacular que me va a cambiar para bien el interés por la historia.
Cuando no ocurre después de leer la mitad del libro , entonces lo dejo por otra lectura.
Gracias Juan José. Bienvenido a este rincón. ¡Un abrazo!
Pienso que el estado de ánimo influye, por lo menos en mi caso. Antes tenía que terminar el libro aunque no me gustase, pero hace tiempo que no pierdo el tiempo habiendo tantos que me pueden hacer pasar un rato placentero.
Gracias Paqui. Muy de acuerdo. ¡Un abrazo!
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